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viernes, abril 26, 2024

La Virgen Roja ¡Viva la Anarquía! ¡Viva la Comuna!

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Paranaländer reseña el comic La Vierge Rouge, publicado en Francia en 2016, donde se cuenta la historia de Louise Michel (1830-1905), revolucionaria y anarquista, figura mayor de la Comuna de París (1870).

Por: Paranaländer

Si vas al negro cementerio,

hermano, lanza sobre tu hermana,

como última esperanza,

rojos claveles en flor

L.M.

Louise Michel. La vierge rouge (La Librairie Vuibert, 2016, la original inglesa titulada The Red Virgin and the Vision of Utopia, 2016) de Mary M. Talbot y Bryan Talbot.

Un comic eminentemente en blanco y negro, el rojo solo parece en objetos puntuales como las banderas y pañuelos comuneros, el fuego de los cañones, lápices de artista, decorado de la carroza fúnebre de la Virgen, el cuaderno de dibujos de Robida, los pasquines oficiales, etc.

La virgen roja de Montmartre muere en 1905. Ella había soñado utopías como ciudades bajo las aguas, contenidas en naves submarinas grandes como países. Fue enterrada en Paris al lado de su madre en Levallois-Perret.

Era conocida como la “Buena Louise”.  Fue durante el asedio prusiano a Paris, muertos de hambre ese crudo invierno de 1870, cuando la virgen anarka se ganó el corazón del pueblo. La gente chic se servía en los restaurantes del boulevard Haussmann piezas “cobradas” del zoológico, además de gatos, perros y ratas. Ella creía hasta el delirio en los poderes taumatúrgicos de la ciencia para producir un mundo nuevo de gente bien alimentada y ya no explotada.

Otro apasionado de la tecnología aparece en la figura de un joven cuartelero Albert Robida (llamado a la Guardia Nacional al igual que Courbet, Degas, Doré, Manet, etc.) en el barrio marginal donde activa Louise Michel y le muestra sus sueños futuristas a lo Verne humorístico ilustrados con su pluma.

Bombardeada un mes entero, en enero de 1871 Paris queda destruida. En febrero, los prusianos desfilan por las rues de Paris, que ha capitulado y ha sido ocupada. En marzo se produce la sublevación popular. Díez días después de la insurrección la Comuna fue oficialmente proclamada. Diez semanas para cambiar el mundo duró la Comuna. “Dormiré cuando muera” es una de sus frases de cabecera proclamada en su furor revolucionario. Toman la palabra como oradores enfervorizados las mujeres, gritan a los hombres que el matrimonio es el mayor crimen de la humanidad y otras lindezas de esa calaña.

En mayo ya no son los prusianos sino los franceses (las fuerzas versallescas) quienes bombardean a los comuneros. Han entrado en Paris como liberadores pero en la Montmartre de Michel nadie les toma como tales. El ejército francés inicia la masacre. Los versalleses como represalia de no encontrar a Louise, encierran a su madre. Entonces ella se entrega y pasa en prisión en Arras y Satory mientras comienza su proceso.

En diciembre de 1871 el Consejo de guerra procesa a Louise. Será condenada a la deportación, pero antes debe pasar dos años presa en Auberive. En agosto de 1873 escribe poemas en el barco Virginia, mientras se dirige a su lugar de deportación, Nueva Caledonia, isla remota en el Pacífico. Lee a Verne y se vuelve anarquista (el poder es fundamentalmente malo) hasta que un día de diciembre de 1873 llega al paraíso tropical vuelto prisión llamado Nueva Caledonia.

El comic omite la vida amorosa de la Virgen roja, nada de Victor Hugo (alude solo a la correspondencia de 30 años que llevaron hasta la muerte del poeta), nada de Ferré (líder comunero para quien escribió el poema “Claveles rojos”, quien fue ejecutado mientras ella estaba presa en Satory en 1871). Tampoco su discurso en el entierro de Blanqui. Si algo de su vida en prisión con el deseo de convertirla en una expedición científica estudiando la lengua y cultura de los indígenas de la isla e incluso ejerciendo de pedagoga entre ellos.

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